Llega féretro de la reina Isabel II al Palacio de Westminster
El féretro de la reina Isabel II llegó el miércoles al Palacio de Westminster de Londres, donde permanecerá en capilla ardiente durante cinco días para que los británicos puedan despedirse de su reina, que será inhumada el lunes en un funeral de Estado.
Ocho militares en uniforme de gala portaron el ataúd de la monarca, fallecida el pasado jueves a los 96 años, hasta un catafalco púrpura situado en el interior del Westminster Hall, la parte más antigua del edificio que acoge el Parlamento británico.
El rey Carlos, sus hijos los príncipes Guillermo y Enrique y otros miembros de la realeza se unieron a una solemne procesión para llevar el féretro de la reina Isabel desde el Palacio de Buckingham hasta el Parlamento el miércoles, entre las salvas de los cañones de artillería y las campanadas del Big Ben.
Una enorme multitud se reunió en el centro de Londres para presenciar la última de una serie de emotivas ceremonias en recuerdo de la monarca, que falleció la semana pasada a los 96 años tras siete décadas en el trono.
El féretro con el cuerpo de Isabel comenzó una lenta y solemne procesión desde su casa en el palacio hasta Westminster Hall, donde será velado durante cuatro días.
Detrás de él iban Carlos y sus hermanos, Ana, Andrés y Eduardo. Los hijos de Carlos, los príncipes Guillermo y Enrique, les seguían detrás, en una escena que recordó a cuando, de niños, hace 25 años, siguieron el féretro de su madre, la princesa Diana, en una procesión similar por el centro de Londres.
También fue una muestra simbólica de unidad, ya que se dice que Guillermo, de 40 años, ahora príncipe de Gales, y Enrique, de 37 años, duque de Sussex, apenas se hablan después de un amargo desencuentro en los últimos dos años.