La ‘Reina del pop’ festeja sus 64 años

Por: Crew Átomos.

Fotos: Cortesía.

Ciudad de México.- 

La artista de música pop celebra su cumpleaños este 16 de agosto rodeada de su familia, con quienes previo a su día disfrutó de unas vacaciones en Italia.

Llamando la atención de nueva generaciones, con una carrera de más de 40 años en el pop, empoderada y orgullosa de su cuerpo, Madonna cumple 64 años rodeada de su familia y su actual pareja Ahlamalik Williams, con quienes celebró en grande un nuevo año de vida.

A través de redes sociales, la “Reina del pop” sigue vigente, pues siempre se le ve muy activa compartiendo parte de su día a día y en esta ocasión tan especial, no fue la excepción, pues la intérprete de temas como Music, Vogue, Hung Up, Sorry, entre otros, compartió con sus millones de seguidores su festejo de cumpleaños.

Previo a su cumpleaños, Madonna y su familia viajaron a Italia, donde celebraron el cumpleaños de su hijo Rocco.

Orgullosa de ser madre, Madonna siempre demuestra en todo momento en sus redes sociales, pues publica fotos y videos compartiendo momentos inolvidables con sus hijos.

Aunque sólo Lourdes María y Rocco, son sus hijos biológicamente, no se conformó y decidió adoptar a cuatro más, David Banda, Mercy James y Stella, y Esther Ciccone, nacidos en Malawi, uno de los países africanos con mayor tasa de pobreza y de mortalidad infantil.

Madonna lleva 40 años de provocación meditada. Entremedias ha grabado buenos discos con una voz limitada. Ella misma ha confesado que el mayor reto de su carrera fue su preparación para la película musical Evita (1996), donde tuvo que trabajar duro con los mejores profesores de canto para que sus capacidades vocales estuvieran a la altura. 

En cuatro décadas ha publicado 14 álbumes, al menos cinco de ellos esenciales: los dos primeros (Madonna, 1983, y Like A Virgin, 1984), llenos de perlas que definen el pop bailable de los ochenta, canciones que sentaban estupendamente tanto en el gimnasio como en las discotecas, temas aún hoy excitantes como Holiday, Everybody, Lucky Star, Material Girl, Like a Virgin o Dress You Up; por supuesto, Like a Prayer (1989), seguramente su mejor trabajo, el que se escapa del contexto de los ochenta para trascender las siguientes décadas; Ray of Light (1998), de lo más valorado de su carrera en cuanto a textos, su gran obra de electrónica de vanguardia, tanto relajada como fiestera, acompañada por el productor William Orbit; y Confessions on a Dance Floor (2005), su reinvención, esta vez de la mano de Stuart Price, un lavado de cara de la música disco de los setenta y principios de los ochenta, actualizándola y sofisticándola, un camino de enorme influencia que ha llegado hasta la actualidad con Dua Lipa como ejemplo más claro.

Hace tres semanas la cantante ofreció una entrevista a la publicación Variety donde anunció que dirigirá la película sobre su vida (hará de ella Julia Garner). Y lo argumentó: “Hay mucha gente tratando de hacer películas sobre mí. En su mayoría hombres misóginos. Así que puse mi pie en la puerta y dije: ‘Nadie va a contar mi historia, excepto yo”.