Julio Ruelas, a 150 años de su nacimiento

Este domingo 21 de junio, se celebra el 150 aniversario del natalicio del pintor e ilustrador zacatecano, Julio Ruelas, considerado por algunos  como un artista luminoso; de talento superior, y por otros críticos, como un artista provocador que rompió las estructuras estéticas en México para abrir brecha a lo que hoy se conoce como el arte moderno mexicano.

Desde niño, Ruelas mostró habilidad para el dibujo,  pero no fue hasta la edad de 16 años, cuando ingresó a la Escuela de Bellas Artes en 1885, donde  ponía gran énfasis en el estudio anatómico, reproduciendo con el mayor detalle cada músculo y articulación.

En 1892 partió rumbo a Alemania para estudiar en la Academia de artes de Karlsruhe. En esa primera incursión en el continente europeo, visitó los grandes museos y conoció ampliamente la magnífica obra de Durero, las fantasías medievales de Hyeronimus Bosch, las dantescas pinturas de Pieter Brueghel El Viejo y el desconcertante retrato de Arnold Böcklin que lo inspiró un año antes de su viaje, probablemente a partir de una lámina para pintar El Ahorcado. Otra de sus influencias es la del artista belga Félicien Rops, quien abordaba temas “satánicos” y de una fuerte carga erótica.

Ruelas se afirma más mediante la expresión del dibujo que por la del color, tendencia presente debido a la difusión de la idea del filósofo Immanuel Kant sobre esta disciplina, acerca de que la representación lineal debía de tener una supremacía ante la representación pictórica. Su estancia en Alemania fue decisiva en su vida y obra.

A su regreso a México, a finales de 1895, denotaba una gran formación artística y por supuesto otra mentalidad. En los años siguientes, trabó amistad con el grupo de “La Revista Azul”, pero fue en 1897 que se convirtió en uno de los primeros ilustradores de “La Revista Moderna”.

Fue gracias a una pensión otorgada por el ministro Justo Sierra y con la ayuda complementaria de Jesús Luján, que viajó a Francia con el objetivo de ampliar su preparación y dominar el grabado en aguafuerte, disciplina que estudió al lado del grabador francés José María Cazin.

Aparte de los aguafuertes y de los dibujos que seguía enviando para ilustrar los textos de los autores de la “Revista Moderna” apenas realizó obras de importancia.

En 1906 la exposición anual de la Galería Nacional de Artes Plásticas dedicó una sección importante a la obra de los pensionados en Europa, originando opiniones muy divergentes y hasta polémicas. Fue la segunda y última vez que Ruelas expuso, ya que no le interesaba y sus pensamientos estaban centrados en quedarse en Europa, de donde no volvió.

Murió el 16 de septiembre de 1907 en París y fue sepultado en el cementerio de Montparnasse.