A 75 años del fin de Auschwitz

Ciudad de México.- Setenta y cinco años después de la liberación de Auschwitz, los sobrevivientes del Holocausto se reúnen este lunes en este lugar del sur de Polonia para honrar a los más de 1,1 millones de víctimas, principalmente judíos, en medio de una gran preocupación por el resurgimiento del antisemitismo.

Más de 200 supervivientes, procedentes de todo el mundo, se congregarán en el lugar del antiguo campo nazi de Auschwitz para compartir sus testimonios que, a la luz de la reciente ola de ataques antisemitas a ambos lados del Atlántico, vienen a ser una advertencia.

“Queremos que la próxima generación sepa lo que hemos vivido, y que nunca se repita”, declaró David Marks, sobreviviente de Auschwitz de 93 años, con la voz entrecortada por la emoción.

Treinta y cinco miembros de su familia cercana y lejana de judíos rumanos murieron en Auschwitz, el campo de exterminio más grande levantado por la Alemania nazi y convertido en el símbolo de los seis millones de judíos europeos asesinados en el Holocausto.

Benjamin Lesser (Cracovia, 1928), otro de los supervivientes presentes en Oswiecim, llegó desde Estados Unidos, donde se trasladó tras la Segunda Guerra Mundial, para relatar su experiencia y participar en los actos conmemorativos de la liberación del campo.

“Recuerdo aquel infierno cuando llegué por primera vez a Auschwitz. Bajé del tren de transporte con mis padres y mis hermanos, a los que no volví a ver porque fueron directamente a la cámara de gas. Aunque entonces yo no sabía qué era eso de la cámara de gas, nadie lo sabía”, recordó Lesser.

“El doctor Josef Mengele (el célebre médico de las SS conocido por sus experimentos con seres humanos) me preguntó si yo podía trabajar, y yo respondí que sí. Tenía 15 años y mi capacidad de trabajar fue lo que me salvó la vida”, afirmó.

“Recuerdo también que un soldado se rio y me dijo: ‘Tú, judío, ¿crees que has venido aquí de vacaciones? Aquí tendrás que trabajar. Olvídate de tu familia. ¿Ves la ceniza que flota en el aire?

Esos son los restos de tus padres, hermanos y familiares’. Así fue nuestra llegada a Auschwitz”.

Desde mediados de 1942, los nazis deportaron sistemáticamente a los judíos de toda Europa a seis grandes campos de exterminio: Auschwitz-Birkenau, Belzec, Chelmno, Majdanek, Sobibor y Treblinka.