El futuro de Soledad en juego
Gabriel Contreras Velázquez
El morbo, vende. Pero no siempre gana batallas políticas. Es el caso de las denuncias en contra del exgobernador Miguel Alejandro Alonso Reyes que esta semana vivieron un punto de inflexión importante e interesante.
Sucedió lo que los monrealistas menos esperaban que sucediera, Alejandro Tello Cristerna (no es la primera vez) marcó distancia del trabajo de la Fiscalía de Justicia del Estado y de las acusaciones en torno a presuntos delitos en la administración de su antecesor.
La senadora Soledad Luévano Cantú optó por la fuga hacia delante, y por primera vez el gobierno le dictó la agenda a la opositora que ha resultado un dolor de cabeza para la administración del Contador. Los papeles se invirtieron.
En su momento, Soledad debió presentar las pruebas del presunto cohecho y complicidad de Tello Cristerna en los delitos que le imputan al exgobernador Miguel Alonso. Acusar ahora de complicidad parece una respuesta de bote pronto, más cargada hacia el morbo y la propaganda.
La fortuna, ese elemento disruptor de la política según Maquiavelo, hoy le juega la peor de las pasadas a la senadora. No sólo está en juego el discurso que ha construido desde que ocupó una curul en la Legislatura local, colocándose como enemiga pública de Miguel Alonso, su fortaleza residía en permanecer en la avanzada contra el exgobernador.
Como aquí lo advertimos el pasado martes, no sólo el escenario local cambió para la senadora, a nivel nacional el perdón al pasado, el “Punto Final” de Andrés Manuel, el “ya no hay guerra” contra el narcotráfico, deslegitimaría completamente la campaña propagandística “contra la corrupción”, que utiliza a NTR Zacatecas como su caja (china) de resonancia.
Lo advirtió también el coordinador de senadores de Morena, Ricardo Monreal, el pasado martes en su artículo de opinión en el diario Milenio:
“Para construir hacia el futuro un nuevo régimen libre de corrupción está la propuesta de “punto final”, en la cual el presidente y el gobierno no pueden girar ni caminar hacia atrás sin convertirse en estatuas de sal, es decir, sin quedar paralizados (y salados) en el intento.”
Y refrendó su posición: “En este sentido, más vale dejar atrás el antiguo régimen presidencial de corrupción y abusos, que ya recibió su castigo ciudadano en las urnas, y empezar un nuevo régimen político libre de esos lastres.”
Aunque Ricardo niegue los acuerdos políticos inconfesables, sabe que las complicidades son el móvil más importante para evitar una lucha frontal contra el pasado inmediato, de donde Morena emergió como ganadora de la elección por consentimiento y parálisis del voto duro priista.
En términos de dialéctica, Soledad vive su momento más álgido de contradicción pues uno de los pilares de su discurso está en juego, y con ella su viabilidad futura. Si Andrés Manuel se decide por el Punto Final y Alejandro Tello deja correr las pesquisas contra Miguel Alonso como hasta ahora lo ha hecho, la coyuntura abriría un hueco profundo en el Grupo Monreal.
A Soledad la fuga hacia adelante no le ayudará más de lo que ya la puso en un temprano predicamento. Y como se dijo al inicio de este artículo, el morbo vende, pero no siempre gana las batallas políticas.
En el barco de David Monreal las cosas distan de tener efectividad. No hay orden, por ende, no hay prioridad en la lucha política. Llevan 13 días intentando captar la atención de una ciudadanía que no se encuentra en el ánimo ni la lógica de salir a las urnas.
No terminan de asimilar que la campaña concluyó. No hay estrategia (si es que la hay) más inverosímil que apostar por una “brigada de artillería” sin un plan táctico de conquista. Avanzan algunos kilómetros, se estancan, se repliegan, buscan un nuevo frente, se estancan, se repliegan.
Rechiflas orquestadas, llamados a revocación de mandato que no tuvieron resonancia entre la bancada de Morena, mucho menos en el partido; litigar en medios las denuncias contra Miguel Alonso cuando a nivel nacional se debate el perdón al pasado; y exhortar a reducir el presupuesto de Morena Zacatecas cuando este año tendrán que pagar 4 millones y medios de multas al partido.
No toda la política gira en torno a las campañas. La temporalidad es distinta. El barco de David naufraga porque, para empezar, el fresnillense ni siquiera tiene los hilos del poder en la mano como lo prometió unos meses atrás y muchos incautos creyeron.
Es un ejército sin cabeza, sin inventario de recursos, utilizando el parque en batallas desarticuladas, además, utilizando la mentira como un agente en contra de su propia táctica de conquista.
Aquí se advirtió también el martes pasado que no sólo David, también la Delegada de Programas de Desarrollo, comenzaba a mentir incluso por convivir y convencer. Dos días después Francisco Elizondo y Pórtico Online captan nuevamente a Verónica Díaz Robles en el embuste.
No se encontraba en la Ciudad de México resolviendo el grave paro de labores en guarderías, y la supuesta reunión con Gema Mercado Sánchez para buscar salidas alternas al conflicto de recursos para el magisterio, resulta que no fue como ella la cuenta, si es que siquiera fue real.
#Casualidades: En Zacatecas el robo de combustible no es ninguna novedad. Consta en registros de la forma en cómo una gasolinera del Grupo Islo, propiedad de Eduardo López Muñóz, era abastecida y abastecía combustible obtenido por “huachicoleo”.
Sería enero del 2015 cuando elementos de las Fuerzas Armadas del 97 Batallón de Infantería aseguraron una pipa cargada con 32 mil litros de combustible de procedencia ilícita, trasladada en un tractocamión blanco proveniente del municipio de Francisco I. Madero, Tamaulipas. La estación marcada con el número 2000 de la cadena Gas Islo, en el municipio de Fresnillo sería el destino final del producto “huachicoleado”.
Trabajadores de la cadena de gasolineras que recuerdan el sombrío episodio describen que, a partir del suceso, Eduardo López cambia su residencia a Aguascalientes, en espera de que el entonces senador Carlos Puente Salas le ayudara a sanitizar el problema que llegó hasta las manos de la Procuraduría General de la República.
Cómplices de otras batallas, Puente y Eduardo López ahora se embarcan en la conquista del Consejo Estatal de Desarrollo Económico. Los une actualmente una sociedad de negocios dedicada a la construcción de un hotel City Express en la Ciudad de México.
Fiel al nuevo amasiato entre el Verde Ecologista y Morena, Puente Salas insiste en un camino, cada día más lejano, para obtener una nueva oportunidad de gobernar Zacatecas. Por eso abandera a su socio López Muñoz al frente un consejo de empresarios que apenas hace un año y medio le declararon la guerra a Alejandro Tello en medio de la polémica por el “impuesto ecológico”, encabezados por quien se apresta a dejar la presidencia, el ganadero Manuel Sescosse Varela.
¿Nuevo frente de choque? Hace tiempo que Gobierno del Estado debió de recortar las atribuciones y prerrogativas del Consejo de “notables”.
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