Para soñar se necesita el corazón y la mente: Oribe Peralta

Por: Crew Átomos 

 

Fotos: Cortesía 

 

Guadalupe, Zac.- 

 

En el marco de la Feria Estatal de la Virgen de Guadalupe 2022, este día el exfutbolista Oribe Peralta llevó a cabo ante cientos de jóvenes su ponencia denominada ‘Detrás del Oro, Experiencia de Vida’ en el Auditorio de la Presidencia Municipal de Guadalupe, donde lo recibió el Presidente Municipal, Julio César Chávez Padilla, quien le agradeció que compartiera su experiencia con la juventud guadalupense para inspirarlos a prepararse y ser determinados.

 

Ante un público mayoritariamente juvenil, Oribe “El Hermoso” Peralta explicó que desde su infancia se fue construyendo su sueño entre canchas de tierra y las cuatro paredes de la casa en la que creció y de cómo desde su infancia los valores de disciplina, perseverancia y sobre todo valentía; se convirtieron en los ideales a seguir día a día”.

 

“Para soñar no se necesita más que el corazón y la mente, en la mente vas dibujando la fantasía, pero en el corazón encuentras la fuerza”, señaló de manera emotiva ante los presentes, a quienes también les compartió que en algún momento de su infancia le preguntó a su padre qué se necesitaba para ser jugador profesional, “me dijo: se necesitan tres cosas: tener talento, que el visor de algún equipo te vea, y la más importante: tener h…vos, y le dije: pues yo los tengo”, dijo con una sonrisa.

Con emoción, el exfutbolista confesó también que la confianza que en ese momento le dio su papá, le hizo pensar en que era posible alcanzar su sueño, y que él podía lograr lo que muy pocos pueden, “por eso les digo que una vez que la posibilidad está creciendo, abrácenla y conviértanla en algo posible, porque siempre, todos tenemos la posibilidad de elegir”, comentó el exjugador profesional.

 

Oribe Peralta nació el 12 de enero de 1984 en la ciudad de Torreón, México, creció junto a sus dos hermanos en una familia donde el futbol era un tema recurrente, de niño solía jugar en los mismos campos de tierra donde jugaba su papá, quien también disfrutaba del futbol y quien le inculcó el gusto por el deporte.

 

Sus comienzos fueron dentro del equipo “La Partida” a la edad de 13 años y donde solo jugaban contra equipos del mismo municipio, sin embargo, luego convenció a sus padres para mudarse a otra entidad e ingresar en el Centro de Sinergia Futbolista (CESIFUT) ubicado en el estado de Durango, Del CESIFUT pasó a las filas del Guadalajara, aunque nunca llegó a debutar; unos meses después, el equipo Monarcas de Morelia le adquirió y lo hizo debutar en el fútbol mexicano de Primera División en 2003, al poco tiempo, se cambió de equipo al Club León, donde jugó 28 partidos como titular, en 2004, se mudó a Monterrey para jugar con los Rayados y luego, en 2006 regresó a Torreón para jugar con el Club Santos Laguna, en 2005, Oribe Peralta fue convocado por la Selección Mexicana absoluta y debutó en el minuto 86 mientras disputaban un partido amistoso contra Argentina, años después, Oribe fue invitado por la Selección Mexicana para jugar con el equipo olímpico en Londres 2012, donde se convirtió en una estrella nacional al meter los 2 goles que les dieron la victoria en la final contra Brasil y conseguir la medalla de oro, en 2014, se anunció su traspaso al Club América, donde fue campeón de la Liga MX y campeón de Liga de Campeones Concacaf en 2015 y 2016.

Oribe Peralta es catalogado como uno de los mejores futbolistas mexicanos, también ha sido un ejemplo de liderazgo mientras ha ocupado el cargo de capitán, y un ejemplo de perseverancia que le ha llevado a lograr sus sueños tanto en la Liga MX como en torneos internacionales.

 

Como parte de su ponencia, destacó que la intención principal es incentivar la creencia de que todo es posible “porque lo más importante es que se lo crean, de que es posible pero no gratis, las oportunidades se construyen y se trabajan todos los días, y esto aplica en tanto en el futbol, como en la vida diaria”. 

 

Agregó que hasta el mejor plan se queda en las mejores intenciones a menos que se conviertan en trabajo diario y resumió en tres palabras su fórmula secreta para alcanzar el éxito: propósito, paciencia y perseverancia, “y agreguen agradecimiento, agradezcan siempre y trabajen todos los días, aún y cuando los resultados no lleguen”, insistió.

 

Oribe Peralta dijo que, si bien el camino no ha sido fácil, las oportunidades tampoco se le negaron, y aconsejó estar preparados para asumir los retos y desafíos ante cada oportunidad que se presente en la vida.

 

Finalmente, recalcó que asumir las dificultades como parte del camino del éxito, también lleva a rodearse de personas que dejan grandes enseñanzas, lo que lo ha motivado a tener un once ideal en el que están sus padres, su esposa, sus hijos, entrenadores y gente que confió en él, incluso quienes no lo hicieron, “porque me hicieron más valiente y determinado”, aseguró.